Para alcanzar su complimiento, la Sader pone en marcha el Plan Nacional de Comercialización Justa, Directa y Sustentable del Maíz
Con la finalidad de atender una problemática estructural en la producción y comercialización del maíz en México, que se caracteriza por la desarticulación entre producción, acopio y consumo, lo que genera desequilibrios en los ingresos de las y los productores y falta de certeza para la industria y quienes consumen, ponen en marcha el Plan Nacional de Comercialización Justa, Directa y Sustentable del Maíz.
Así lo dio a conocer la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (Sader), al precisar que la primera etapa se implementará en ocho estados: Chiapas, Oaxaca, Veracruz, Campeche, Tabasco, Quintana Roo, Morelos y Guerrero, detalló la dependencia federal.
Este plan promueve un modelo justo, directo y sustentable para la comercialización del maíz nacional, que beneficiará tanto a quienes producen como a quienes consumen, destacó el encargado de la Coordinación General de Comercialización y Financiamiento de Sader, Héctor Arronte Calderón.
En la primera Asamblea de Vinculación –con un aforo de 350 líderes de grupos de productores de maíz del ejido Miguel Hidalgo, en el municipio de Venustiano Carranza–, Héctor Arronte explicó que esta estrategia busca asegurar el acceso equitativo a mercados, la inclusión de productoras y productores de pequeña escala y el desarrollo económico sostenible.
Estandarizan calidad de los productos
Este objetivo, agregó Sader se logrará mediante la producción de volúmenes atractivos; el establecimiento y estandarización de la calidad de los productos; el cumplimiento de contratos y obligaciones fiscales; la diversificación de productos para aprovechar al máximo la producción agropecuaria.
La carencia de servicios técnicos y financieros que fortalezcan la posición de las y los productores en los procesos de negociación para lograr acuerdos comerciales más justos.
Por ello, esta estrategia responde a la urgencia de construir un modelo justo, directo y sustentable para comercializar el maíz nacional, en beneficio de quienes lo producen y consumen, reiteró Arronte Calderón.
Participan las Escuelas de Campo de Sader
Estos esfuerzos se llevan a cabo con el acompañamiento de las Oficinas de Representación de las Entidades Federativas (OREF), en conjunto con las Escuelas de Campo de Sader.
“Con la suma de esfuerzos y el trabajo colaborativo, lograremos la soberanía alimentaria de nuestro país y mejoraremos la calidad de vida en el campo mexicano”, concluyó Arronte Calderón.
En la asamblea también participaron representantes de empresas nacionales de comercialización afiliadas a la Cámara Nacional del Maíz Industrializado (CANAMI), proveedoras de semillas, productos agroecológicos y servicios financieros del programa de crédito Cosechando Soberanía.